26 Septiembre

26 de Septiembre

1568. Carta de Sta. Teresa de Jesús a Francisco Salcedo "el caballero santo" que

Teresa de Jesús

mucho había ayudado a Sta. Teresa al principio de su vida mística: "No piense es tiempo perdido escribirme, que lo hemos menester a ratos a condición de que no me diga tanto que es viejo, que me da en todo mi seso pena, y como si la vida de los mozos tuviera alguna seguridad!. Désela Dios hasta que yo me muera". "Hable v. p. a este padre, Fr. Juan de la Cruz, suplícoselo y favorézcale en este negocio, que aunque es chico entiendo es grande en los ojos de Dios. Cierto él nos ha de hacer acá harta falta, porque es cuerdo y propio para nuestro modo. Y así creo le ha llamado Ntro. Señor para esto. No hay fraile que no diga bien de él, porque ha sido su vida de gran penitencia. Aunque ha poco, mas parece le tiene el Señor de su mano, que aunque hemos tenido algunas ocasiones en negocios y yo soy la misma ocasión que me he enojado con él a ratos, jamás le hemos visto una imperfección. Animo lleva, mas como es solo, ha menester lo que Ntro. Sr. le da para que lo tome a pechos. El dirá a v. m. cómo acá nos va. Torno a pedir en limosna a v. m. me habla a este padre, fr. Juan de la Cruz y aconseje lo que le pareciere, para su modo de vivir. Mucho me ha animado el espíritu que el Señor le ha dado y la virtud entre hartas ocasiones para penar, llevamos buen principio. Tiene harta oración y buen entendimiento. Llévele el Señor adelante". (Cartas de Sta. Teresa de Jesús)

1591. Carta del P. Gracián de la M. de Dios, desde la cárcel de S. Hermenegildo de

Jerónimo Gracián

Madrid, a D.Teutonio de Braganza, Arzobispo, de Ebora. Le da cuenta de algunas insolencias que sus prelados usan con él: "Procure algún remedio V. S. de suerte que no suceda lo que estos padres desean, que es que yo salte las paredes, lo cual no conviene que haga, aunque muera mil veces. Decían ellos mismos que nunca habría paz hasta que yo me saliese de la Orden. Habrá como mes y medio que dando parte al médico de una enfermedad de cabeza que traía, que me quitaba el sueño me mandó reparar, comiendo algunas veces carne. Y como el enfermero diese parte a los prelados, dijéronme que disimulase. Hay menudencias que decir a V. S. que no cabrían en mucho papel, si lo tuviera, que no tengo más que este como me han quitado el escribir, hablar, predicar, confesar, con mucha nota y escándalo del pueblo".(Cartas del P. Gracián)

1592. Dña. Ana de Peñalosa, que tenía conseguido del P. Nicolás Doria el permiso para que dondequiera que muriese S. Juan de la Cruz, su enterramiento definitivo estuviera en el Convento de Segovia, envía a Úbeda a D. Juan Medina Cevallos, con dos criados y de noche ocultamente descubren el cuerpo del santo, pero al hallarlo fresco y blando sólo cortaron un dedo del que salió sangre, con la que empaparon diversos pañitos y llevaron el dedo a Dña. Ana de Peñalosa, dejando para el siguiente año el traslado de su cuerpo. (Dios habla en la noche. P. Fortunato Antolín)

1595. El General de la O. del Carmen A. Obs. Juan Esteban Chizzola, que ha visitado los Conventos de Castilla, Portugal, Andalucía, publica decretos para ampliar la vida regular de las monjas carmelitas, previa consulta con los Provinciales de España. Tratan del Oficio Divino, clausura, vida de comunidad, admisión de novicios, elección de oficiales, capellanes, confesores, administración de bienes,  capítulos de culpa etc. Estas Constituciones, las primeras de esta clase llenaban una necesidad. Una breve y práctica guía para la vida contemplativa de clausura, según las normas del Concilio de Trento. Las monjas han de hacer dos medias horas de meditación cada día, examen de conciencia antes de retirarse en la noche. Han de confesarse una vez al mes, por confesores de la Orden, excepto los tiempos extraordinarios. Se recomienda la comunión frecuente. Las monjas han de sostenerse por sus propios trabajos. Lo que consigue cada monja ha de aplicarse primero a sus necesidades y luego a las necesidades de la comunidad: prohibida la donación de regalos a los religiosos: los monasterios de beatas carmelitas deben tener velo y clausura y sino deben negar la facultad de recibir novicias. (Los Carmelitas. P.  Joaquín Smet. o. carm.)

1603. Carta del P. Felipe de Jesús, Definidor Prov. al P. Gracián. En ella manifiesta su animosidad: "No sé a qué propósito y con qué autoridad trata v. p. los negocios de la canonización de N. M. Teresa de Jesús, ni con qué color se ha metido en ello, pues sólo v. p. y su mal modo de proceder han estorbado su canonización. No me puedo persuadir, que hay en esto algún embeleco o enredo. Y ansí suplico a v. p. cese destas diligencias, porque daré cuenta a quien se lo pueda remediar y se remediará como lo demás. Y si V. P. tuviera tantica sangre en el ojo, no se habría de atrever a parecer con estos embustes delante de gente grave, que le conocen muy bien, ni tampoco delante de religiosas, ni religiosos nuestros, ni menos en este pueblo, donde saben muy en particular todo el discurso de su vida y las causas de estar en estado en que agora está y a oyentes que saben esto, mucho provecho hará su doctrina de V. P." (P. Juan L. Astigarraga en las Cartas del P. Gracián)

1603. Carta del P. Gracián a Dña. Beatriz Ramírez de Mendoza, condesa de Castelar sobre una curiosa Congregación de monjas con hábito de Jerónimas, Regla de S. Agustín y Constituciones de Carmelitas Descalzas. "Es, dice el P. Gracián, hacer una religión distinta de la que ahora hay en la Iglesia, que así como S. Agustín y Sto. Domingo son dos religiones diversas, aunque tengan la misma Regla, porque las Constituciones son diversas y así aunque sigan la misma Regla de S. Agustín estas monjas, será diversa religión de las Jerónimas y esto ninguno lo puede fundar, sino el Papa". (Cartas del P. Gracián)

"Si una vez Dios duerme en el centro de tu corazón. No lo despiertes. Eso es también una gracia" (Isabel de la Trinidad)

Fuente: Miguel Ángel Lecumberri, Efemérides Carmelitanas Septiembre-Diciembre. Tomo III. Santiago de Chile 1996. Transcripción, arreglo fotográfico, recopilación y actualización: Iván de Jesús Mora Pernía, ocd.(IDJMP)